MUNDO

Argentinos en Punta Arenas festejaron su tercera Copa del Mundo

Tras el pitazo final en Qatar, la hinchada Albiceleste llegó hasta la Plaza de Armas y luego continuaron los festejos en consulado trasandino.

Un poco más de cincuenta personas festejaron en el centro de la ciudad, e incluso los más entusiastas se animaron a cruzar la frontera.

Gonzalo Montiel vencía al portero Hugo Lloris y se acababa la tanda de penales que le daba a la Argentina su tercera Copa del Mundo. El grito de gol que venía desde Doha se hacía eco en Buenos Aires y desde Ushuaia hasta La Quiaca… pero también en el centro de Punta Arenas.

Ya se habían escuchado fuerte y por toda la ciudad los tres gritos de gol de “la Scaloneta”, pero una vez que el jugador del Sevilla Fútbol Club certificó la obtención del campeonato para el conjunto trasandino, la alegría se desató y las camisetas celestes y blancas comenzaron a colorear las calles.

Más de cincuenta argentinos residentes y turistas celebraron en el centro de la capital regional el triunfo de su selección, acompañados también de chilenos de origen argentino, o que simplemente apoyaban al equipo vecino por un sentimiento de simpatía y hermandad patagónica.

Desde la lejana y norteña provincia del Chaco, fronteriza con el Paraguay, llegó hasta Punta Arenas, Santiago, un joven que apenas podía hablar tras el partido debido a los gritos de gol y desahogo durante los más de 120 minutos de nervios.

“No puedo hablar ¡Después de 36 años! ¡Al fin una buena noticia en medio de todo lo que nos ha pasado como país!” exclamaba con su marcado acento chaqueño mientras saltaba junto a un grupo de compatriotas congregados en el centro de Punta Arenas.

RIO GRANDE

Marcelo, un neuquino residente hace treinta años en Magallanes, lucía orgulloso su bandera argentina, sosteniéndola emocionado.

“Fue espectacularmente difícil, tocó sufrirla, pero aquí estamos, lo logramos, y hoy se han derribado todos los mitos sobre Messi. Él es más grande que la mismísima Argentina” señaló.

Priscila, una fueguina de Ushuaia, que reside desde hace nueve años en Punta Arenas, también salió a celebrar vistiendo la camiseta albiceleste, que a partir de hoy llevará tres estrellas en el pecho.

“Sufrimos un montón. En el primer tiempo sentimos que la teníamos ganada, pero después tocó sufrir en el segundo tiempo” dijo.

fuente. elpinguino

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