Boca Juniors mantiene la incógnita sobre su presentación ante Banfield
Luego del fracaso de que le autoricen un "corredor sanitario" especial para los jugadores que rompieron la burbuja en Brasil, el club se debate entre presentar un equipo de juveniles o no jugar y exponerse a duras sanciones reglamentarias.


Boca Juniors no había comunicado oficialmente hasta la noche del viernes la decisión que tomará para el partido del sábado contra Banfield, por la segunda fecha del torneo de la Liga Profesional de Fútbol, luego de que fracasaran sus intentos de postergarlo o gestionar un “corredor sanitario” y quedara en una encrucijada: jugar con juveniles o no presentarse y exponerse a duras sanciones reglamentarias.
La decisión, de la que por cierto Boca no tiene obligación de informar, era todavía esta noche motivo de un fuerte debate internoentre los responsables del fútbol del club de la Ribera, que a la certeza de haber sido perjudicados en los partidos de la Libertadores ante Atlético Mineiro le sumaron una sensación desagradable de falta de solidaridad de los clubes argentinos.
En caso de presentarse, la opción que parece más firme, Boca formaría con los mismos jugadores que este viernes ganaron el encuentro de la Reserva con Banfield: no hay disposición que obligue al club a darles un tiempo mínimo de descanso entre un partido y otro, según aclaró Futbolistas Argentinos Agremiados.
También podría presentar a juveniles de las divisiones Cuarta y Quinta, ya que la AFA, excepcionalmente, le permitirá eludir el requisito reglamentario de un mínimo de ocho profesionales.
Caso contrario, si Boca decide no ir al encuentro, el artículo 109 del reglamento de la AFA especifica: “Cualquier equipo que no se presentara a jugar, se le dará por perdido el partido y al término del torneo se le descontarán 3 puntos por cada encuentro que no se presente” y, además, se le aplicaría al club una multa económica.
Si no se presenta con Banfield se supone que tampoco lo hará con San Lorenzo, el martes que viene por la tercera fecha.
El expediente en ese caso pasa de la LPF a la AFA, que es de quien depende el Tribunal de Disciplina, autoridad de aplicación de las sanciones previstas por el reglamento.
El antecedente inmediato lo protagonizó River, cuando no se presentó a jugar ante Atlético Tucumán en la primera fecha de la Copa de la Superliga que finalmente se canceló por la pandemia, pero los puntos se contabilizaron para las copas y el actual promedio del descenso.
En ese caso, en noviembre del 2020, la sanción del Tribunal de Disciplina fue sólo económica: River tuvo que costear el viaje de su rival a Buenos Aires. No hubo quita de puntos.
Según la explicación que dio el Tribunal en ese momento, “es claro que River actuó protegiendo un bien jurídico de notorio valor, como es la salud de sus empleados y jugadores, comprometido por riesgos de público conocimiento y cuyos efectos quedaron reconocidos y contemplados por normas de carácter público dictadas oportunamente”.
Luego, Atlético apeló el fallo por el incumplimiento del reglamento y no respetar las directivas de la entidad organizadora, y por el momento no hubo nueva resolución del Tribunal.
Este viernes desde temprano corrieron versiones de ida y vuelta respecto del posible final a esta novela que comenzó en Brasil, cuando luego de quedar eliminados en octavos de final de la Libertadores ante Atlético Mineiro, jugadores y cuerpo técnico protagonizaron serios incidentes en los pasillos internos del estadio con efectivos de la Policía local e integrantes del equipo de seguridad privada.
Aunque, una vez completados los procesos judiciales (el plantel debió trasladarse a una comisaría por la imputación de distintos jugadores, pero permaneció en el micro), la Conmebol garantizó que Boca no había violado los protocolos sanitarios, el Ministerio de Salud de la Nación interpretó que sí lo había hecho y dispuso el aislamiento por siete días del plantel al regreso.
La dirigencia de Boca se movió con intensidad primero para evitar el aislamiento y hoy mismo para gestionar un “corredor sanitario” que le permitiera jugar los partidos con Banfield y San Lorenzo con su plantel profesional. En ambos casos recibió una razonable respuesta negativa por parte de las autoridades sanitarias.
fuente. telam