“Con este tipo de actividades buscamos generar nuevas oportunidades de negocios para que nuestros pescadores artesanales puedan proveer productos de excelencia”
Así lo destacaba el secretario de Desarrollo e Inversiones, Ariel Castiglione donde se llevó una actividad en la ciudad de Buenos Aires, donde productos fueguinos de pesca artesanal, fueron presentados ante cocineros y responsables de restaurantes premium.
Productos fueguinos de pesca artesanal fueron presentados ante cocineros y responsables de restaurantes premium de cocina de autor, comida japonesa y alta cocina en Buenos Aires. La actividad fue organizada por la secretaría de Desarrollo e Inversiones de Casa de Tierra del Fuego junto con el Ministerio de Producción y Ambiente y la secretaría de Pesca, con el objetivo de generar nuevas oportunidades de negocios y viabilizar el contacto directo entre productores y empresarios gastronómicos.
La actividad que fue sponsoreada por Francisco Morelli de “Gauchomalo” con sus vinos “Sierra Lima Alfa” se realizó en Sashimiya, un restaurante de comida japonesa con una trayectoria de más de 18 años, donde estuvieron presentes cocineros especialistas en conservar los sabores y la cultura del país asiático en Buenos Aires y en desarrollar platos de autor y alta cocina.
Entre los cheff invitados se encontraban Lorena Nonaka (La grulla), Claudio Agarie (Hotaru), Ana Irie y Josefina Diana (ex Chila), Marcelo Arakaki y Naomi Kanemoto (Sashimiya), Martin Sclippa, Leo Liberman, Carolina Boan y César Sagario.
El secretario de Desarrollo e Inversiones, Ariel Castiglione, destacó el recibimiento y la “excelente predisposición” de los cocineros y celebró el operativo conjunto entre el personal del Ministerio de Producción y Ambiente y, especialmente, del subsecretario de Pesca, Diego Marzioni y su equipo de trabajo“ que permitió traer productos como la merluza negra, centolla, erizo y mejillones frescos, sin congelar, y a pocas de horas de haberse recolectado por productores fueguinos de pesca artesanal”.
“Una particularidad de este evento es que analizamos la trazabilidad y la logística para que los productos lleguen frescos, sin congelar, a la cocina; se pescaron ayer, se despacharon por Aerolíneas Argentinas Cargo y se recibieron hoy. Ha sido un operativo exitoso que permitió que prestigiosos cocineros trabajen los productos de distintas maneras, exploren las posibilidades, el potencial y analicen sus variantes para la colocación en el mercado”, detalló Castiglione.
“Con este tipo de actividades buscamos instalar nuevas oportunidades de negocios en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para que nuestros pescadores artesanales puedan proveer productos de excelencia y lograr un nicho comercial más que interesante como son los restaurantes porteños premium de comida japonesa”.
Durante el análisis de los productos, preparación de los platos y degustación, los cocineros destacaron su frescura, las características y su calidad; sobre todo en los erizos, mejillones y merluza negra.
Naomi Kanemoto, propietaria de Sashimiya, remarcó que “para realzar y difundir la comida japonesa se tiene muy en cuenta la ambientación, el tipo de cocción y, sobre todo, conocer muy bien los productos, la materia prima y la frescura. Hoy fue una jornada importante porque es la primera vez que tenemos este contacto directo con los productores de Tierra del Fuego”.
“Estamos muy agradecidos a la Casa de Tierra del Fuego por darnos esta posibilidad de conocer lo que es una centolla recién extraída, los mejillones, la merluza y los erizos. En esta degustación, destacamos mucho el nivel de frescura de los productos y eso es muy importante”, subrayó Kanemoto.
Marcelo Arakaki, precisó que “es espectacular tener los productos tan frescos directamente de los productores. Hace rato que no veo esta calidad, muy nobles para trabajar y donde prácticamente no hay que intervenirlos mucho; lo podes comer crudo y están muy buenos”.
Por su parte, Martin Sclippa, explicó que si bien se realizaron “varias cocciones”, se buscó intervenirlos lo menos posible: “El producto que más destaco fue el erizo, he tenido la posibilidad de comerlo en distintas partes del mundo, donde su sabor es más iodado; el fueguino es mucho más dulce armonioso; la merluza negra es espectacular de un calibre y tamaño óptimo, la centolla fue más grande de las que había visto alguna vez con una carne fresca, delicada y dulce, y los mejillones estaban espectaculares, sin rasgos de arena que es lo que suelen tener lo que se consumen en Buenos Aires usualmente”, analizó el cheff.