El próximo 10 de abril la CGT puso la fecha para un nuevo paro general al gobierno de Milei
habrá movilizaciones de los gremios a partir de las 12 del mediodía del miércoles 9 de abril, en coincidencia con la habitual marcha de jubilados al Congreso. A su vez, también definieron manifestarse el 24 de marzo por el Día de la Memoria.

Después de idas y vueltas, la CGT puso la fecha para un nuevo paro general al gobierno de Javier Milei: será por 24 horas el próximo jueves 10 de abril. Y además se incluirán movilizaciones el miércoles 9 de abril desde las 12 horas del mediodía. La medida de fuerza -la tercera de esta índole en lo que va de la administración libertaria- había sido adelantada por el triunvirato de la central sindical luego del primer congreso nacional de la UTEP.
Este nuevo paro general (los anteriores fueron el 24 de enero de 2024 y el 9 de mayo de ese mismo año) se da en un contexto marcado por continuos despidos, la quita de subsidios; la inestabilidad de los precios; la apertura de las exportaciones en detrimento de la industria nacional; la represión a jubilados y organizaciones que se manifiesten; el crimen contra el fotógrafo Pablo Grillo (que sigue en grave estado) y la reciente ratificación de un nuevo endeudamiento con el Fondo Monetario (FMI).
“Exigimos la libertad para negociar paritarias libres. Pedimos un aumento para los jubilados. Planteamos nuestro apoyo a la discusión que se va a dar en el Congreso por el bono de 70 mil pesos para los jubilados y repudiamos la represión policial que ocurrió la semana pasada”, dijo Héctor Daer, de la conducción de la CGT.
Daer, del gremio de Sanidad, anunció la medida de fuerza junto con Carlos Acuña (Estaciones de Servicio) y Octavio Argüello (Camioneros), los otros dos triunviros al frente de la central obrera.
A su vez, Daer reclamó “volver a discutir las asignaciones familiares y los problemas del sector productivo e industrial de la Argentina”. Y también exigió exigió que “se reabra la obra pública”, dado que “muchas obras que están realizadas en un 90 por ciento y es muy grande la pérdida al no terminarlas”.
La adhesión de la UTA
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) confirmó que los colectiveros se sumarán al próximo paro general que la CGT realizará el 10 de abril próximo.
“La UTA apoya lo que propuso la CGT para el paro general porque no se sostiene más la falacia oficial con respecto a una inflación que no existe; hoy por hoy la canasta básica de una familia tipo está en no menos de dos millones, hay un aumento de inflación interanual de un quince por ciento”, sostuvo Gabriel Gusso, secretario gremial de la UTA.
Para el dirigente sindical, “el Gobierno busca que los salarios de los trabajadores vayan por debajo de la inflación, lo mismo que está haciendo con los jubilados, a los que además les sacó los remedios”.
Gusso sostuvo que “hay un ataque contra el trabajador y un financiamiento que el Gobierno está haciendo a costillas del ciudadano, y que no tiene límites. No se puede vivir de esta manera y no te dan los números”, añadió.
Un paro demorado
La semana pasada, en el salón Felipe Vallese, Daer había anunciado que este jueves se realizaría la reunión de consejo directivo de la central obrera para definir “un paro por 24 horas antes del 10 de abril” e invitó “a que nos acompañen a construirlo”.
Es preciso “fortalecer y cuidar las organizaciones de las mezquindades y egos que aparecen por todos lados. Porque con organizaciones sólidas podemos llevar adelante la voz de los trabajadores y trabajadoras”, dijo el titular de Sanidad en ese momento.
El triunviro reconoció también que el Gobierno, desde la Secretaría de Trabajo, “vienen pisándonos los salarios a través de la homologación de paritarias. Algo que jamás se usó de esta manera para dejar los salarios por debajo de la inflación”, dijo. Luego Daer advirtió que el Presidente supo decir que su modelo es monetario que gira alrededor de cuatro variables: el dólar, el precio mayorista, el minorista y el salario.
“Si el dólar sube un uno por ciento mensual, los precios suben, pero la torta de pesos es la misma. Entonces, no cabe duda que lo que apuntan es a bajar el salario. Alguno dirá que es un problema de los que tienen salarios, pero no, porque es la recesión que comienza a tener consecuencia en toda la sociedad”.