Francia convulsionada: sindicatos suman el reclamo salarial para ganarle a la inflación en el Día del Trabajador

En medio de la presión del gobierno por abandonar la discusión sobre la reforma jubilatoria y construir un pacto social entre sindicatos y patrones, ciertos sectores gremiales plantean ponderar en las movilizaciones por el Día del Trabajador los reclamos salariales.

Esto va escindido de la demanda que levantan amplios sectores de trabajadores de anular la reforma de las pensiones que aumenta la edad jubilatoria en Francia de 62 a 64 años. 

“Los salarios son un enorme problema en Francia“, resaltó la secretaria general de la Confederación General del Trabajo (CGT, segunda central en Francia), Sophie Binet, quien planteó que la discusión no figura en la agenda que les está proponiendo el Gobierno en su intento por apaciguar las aguas en Francia. 

Binet, quien participaba en la tradicional movilización del 1° de mayo en París, organizada por todo el arco sindical en continuidad de las manifestaciones contra la reforma de las pensiones, denunció en dialogo con distintos medios que “por primera vez los salarios están bajando en euros constantes por la explosión de los precios”, en referencia a la creciente inflación. El reclamo de los sindicatos en este sentido es establecer una cláusula gatillo que permita indexar los salarios a la inflación, como ya existía en Francia hasta 1983, y como sucede en otros países vecinos como Bélgica y Luxemburgo.

“La única forma que tenemos de evitar los daños -resaltó- es indexar todos los salarios con los precios” porque cada vez más empleados quedan por debajo del salario mínimo, explicó. En el mismo sentido habló el dirigente del primer sindicato francés, Laurent Berger, de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT), planteó que en la próxima reunión con la primera ministra, Élisabeth Borne, deberán discutir sobre “la subida de los mínimos sectoriales”.

Berger también detalló que hay algunos sectores que quedan estancados en ese salario mínimo durante años por falta de negociaciones en sus convenios. “Por tanto -agregó-, uno de los temas que vamos a defender es condicionar las ayudas públicas a las empresas a que no haya mínimos sectoriales que estén por debajo del salario mínimo general”.

Tanto Binet como Berger aseguraron que incluirán dentro del programa de reclamos la anulación de la reforma jubilatoria. Los distintos líderes sindicales se unirán para diseñar una estrategia aunque tienen matices sobre cómo seguir por la ley promulgada por el presidente de Francia, Emmanuel Macron. Berger, por ejemplo, opina que ya no se conseguirá más nada con las movilizaciones en este sentido. 

El sindicalista señaló que “hay que decir claramente que la ley está promulgada. No hay que engañar a los trabajadores: No vamos a conseguir con una manifestación que el Gobierno dé marcha atrás. Pero no vamos a callarnos y vamos a mostrar nuestro descontento”. Por eso, busca jerarquizar el reclamo salarial.