La ONU determinó un aumento del 49% del número total de estructuras afectadas por la guerra
Esta cifra "subrayan la urgente necesidad de un alto el fuego inmediato y de apoyo para hacer frente a la creciente crisis humanitaria en la Franja de Gaza.
Naciones Unidas informó este martes que su agencia de análisis satelital determinó que 18% de la infraestructura de la Franja de Gaza resultó dañada desde el inicio del conflicto entre Israel y Hamas, desencadenada por el ataque del movimiento islamista palestino en territorio israelí el 7 de octubre.
El Centro de Satélites de Naciones Unidas (Unosat), que se basó en una imagen tomada con el satélite de muy alta resolución WorldView-3, determinó un aumento del 49% del número total de estructuras afectadas con respecto a una evaluación del 7 de noviembre.
Estas cifras “subrayan la urgente necesidad de un alto el fuego inmediato y de apoyo para hacer frente a la creciente crisis humanitaria en la Franja de Gaza. El impacto en las infraestructuras civiles es evidente, con miles de viviendas e instalaciones esenciales dañadas”, subrayó Unosat, según reprodujo la agencia de noticias AFP.
A 26 de noviembre, Unosat identificó “10.049 estructuras destruidas, 8.243 estructuras seriamente dañadas y 19.087 estructuras moderadamente dañadas, lo que suma un total de 37.379 estructuras afectadas. Esto corresponde aproximadamente al 18% del total de estructuras de la Franja de Gaza”, afirmó la agencia en un comunicado.
El conflicto
La escalada de violencia comenzó el 7 de octubre, cuando milicianos de Hamas se infiltraron en Israel desde Gaza, asesinaron a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y se llevaron a 240 rehenes, incluyendo una veintena de argentinos.
Unos 80 rehenes fueron liberados el mes pasado en virtud de una tregua de una semana mediada por Qatar, a cambio de la excarcelación de cientos de mujeres y adolescentes palestinos presos en Israel.
Más de 18.000 personas, en su mayoría niños y mujeres, murieron desde el 7 de octubre en bombardeos israelíes en Gaza, y casi 50.000 resultaron heridos. Unos 1,9 millones de palestinos -el 80% de la población del territorio- tuvieron que abandonar sus casas.